DUI / People v G.E.

El cliente era un joven que no podía dormir y salió a tomar un par de cervezas en Boulder, Colorado. Cuando volvía a casa, giró por error en dirección contraria en una calle de sentido único y le pararon. Explicó a los agentes que hacía un mes que se había mudado a la ciudad. Le hicieron salir y realizar pruebas de maniobrabilidad en carretera en camiseta en marzo. Tenía frío, pero se le veía bastante bien en la cinta. Aún así fue detenido y le pidieron una muestra de su aliento, a lo que accedió y sopló justo por encima del límite legal. Sin embargo, después de mi interrogatorio a los agentes encargados de realizar la prueba de alcoholemia correctamente, los fiscales coincidieron en que los agentes la habían cagado por completo. No le vigilaron, eructó y se tocó la boca repetidamente por la indigestión. Todos estos oficiales aprendieron ese día cómo administrar correctamente una prueba de alcoholemia. Gracias a los fiscales por hacer lo correcto y desestimar el caso. El juez comento que despues de un contrainterrogatorio tan habil que negaba una tonelada de evidencia, era bueno ver algo de honor del lado de la fiscalia haciendo lo correcto y desestimando el caso. Al final, honestamente, su indigestión fue la razón por la que la prueba de alcoholemia estaba un poco pasada. Parecía y sonaba completamente normal, pero no pudimos averiguar por qué el aliento estaba por encima - hasta que lenta y metódicamente expusimos los problemas en la administración.